No lleva carne pero no te dejes engañar, es muy contundente.

Ingredientes para 4 personas:
  • 3 Berenjenas grandes.
  • 9 placas precocinadas de pasta de lasaña.
  • 4 tomates de ensalada (firmes), o una buena conserva de tomate natural.
  • Orégano.
  • 1 bola de mozzarella fresca (cortada a rodajas).
  • Sal/pimienta.
  • Aceite (para freir).
  • Queso rallado
ELABORACIÓN:

Cortamos las berenjenas (con o sin piel) a rodajas de unos 3 o 4 mm, las freímos en aceite abundante y las reservamos encima de papel absorbente. Preparamos los tomates poniendo agua a hervir y escaldándolos durante 1 minuto. Rápidamente los ponemos en agua fria, los pelamos, retiramos las semillas y los cortamos a cuartos. Si disponemos de una buena conserva de tomate natural, nos ahorramos este paso. Ponemos la pasta de la lasaña en remojo siguiendo las instrucciones del fabricante.

En una bandeja honda y apta para horno empezamos poniendo un piso de pasta de lasaña, encima va una capa de berenjena, unos trozos de tomate, orégano y unas rodajas de queso mozzarella. Vamos repitiendo la operación y acabamos el último piso con berenjena. Tiramos el queso rallado y gratinamos durante unos 10 minutos o hasta que el queso quede dorado.

SUGERENCIAS:
  • También se puede hacer con otros rellenos, como rodajas de patata, setas o espinacas.
  • Si se quiere hacer un plato más contundente, lo podemos rematar con una salsa bechamel por encima.