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Si piensas en un entrante suave para hacer pasar el frío, piensa en esta crema de apionabo.
El apionabo es una hortaliza comestible de la familia del apio. Del apio aprovechamos las hojas y el tallo pero en el caso del apionabo la parte comestible es el bulbo. Es una hortaliza que se cultiva en invierno y que a pesar de ser de origen mediterráneo la hemos utilizado muy poco en nuestra gastronomía. Si que está más valorada en otros países europeos, sobre todo en Francia, donde lo llaman celerí.
Gastronómicamente se suele hacer en crema y en este caso le hemos acompañado con unas tiras de puerro crujientes. Si no queremos poner puerro para decorar, podemos poner dados de pan tostado, virutas de jamón serrano o también podemos esparcir unas semillas de sésamo por encima.
Ingredientes para 4 raciones:
- 400 gramos apinabo.
- 1 puerro.
- 1 patata mediana.
- Sal/pimienta.
- Aceite.
- 1 cucharadita de cúrcuma en polvo.
- Caldo de verduras o agua.
ELABORACIÓN:
1- Pelamos y cortamos en dados el apionabo y la patata. Reservamos unos 5 cm. del puerro (si queremos utilizarlo también para decorar) y el resto también lo cortamos en dados.
2- Ponemos una cazuela a fuego medio, ponemos a cocer el apionabo, la patata, el puerro, lo salpimentamos y lo cocinamos 2-3 minutos. Añadimos el caldo (o el agua) justo hasta cubrirlo todo. Lo cocinamos a fuego medio durante unos 20 minutos o hasta que veamos que está cocido, podemos pinchar las patatas para comprobarlo.
3- Una vez cocido si vemos que queda muy aguado retiramos un poco de líquido con un cucharón y lo reservamos (lo podemos necesitar más adelante). Lo trituramos todo con la batidora eléctrica, lo rectificamos de sal y pimienta y echamos una pizca de cúrcuma en polvo. Seguimos removiendo con la batidora y si vemos que nos queda espeso añadimos parte del líquido que hemos retirado antes, pero en cualquier caso lo ajustamos a nuestro gusto.
4- Cogemos el trozo de puerro que hemos reservado y lo cortamos en tiras bien finas. Las freímos en una sartén con abundante aceite durante unos segundos, procurando que queden crujientes sin que lleguen a quemarse. Seguidamente las ponemos sobre papel absorbente y también las salaremos. Por último las ponemos sobre la crema y lo servimos caliente.
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