Con dos cocciones que garantizan que nos quedará bien tierno y meloso.
Ingredientes para 3-4 personas:
- ½ costillar de cerdo (de una pieza).
- 3 o 4 nabos (blancos o negros).
- 10 ciruelas pasas.
- Salvia fresca.
- Miel.
- Sal, Pimienta.
- Aceite de oliva.
- 2 dientes de ajo.
- 1 cebolla o puerro.
- Agua o un caldo suave.
ELABORACIÓN:
1- Podemos hacerlo en una olla normal o una olla rápida, nosotros hemos escogido la segunda opción. Empezamos poniendo la olla a fuego medio con un chorro de aceite, los dientes de ajo, la cebolla o el puerro a trozos y lo doramos durante un par de minutos. Salpimentamos el costillar, la añadimos a la olla (si no nos cabe entero lo podemos cortar en 2 trozos) y lo doramos también durante unos 5 minutos junto con el resto de ingredientes que ya tenemos en la olla.
2- Lo cubrimos con agua o un caldo suave, lo tenemos al fuego durante unos 45 minutos si lo hacemos en una olla normal, o unos 15 minutos si lo hacemos en una olla rápida.
3- Retiramos el costillar de la olla y lo ponemos en una bandeja honda de horno, colamos el jugo y lo reservamos.
4- Pelamos los nabos, los cortamos a tiras gruesas y los añadimos a la bandeja de horno, lo cubrimos todo con el jugo, lo probamos y rectificamos de sal.
5- Lo horneamos a 180 grados con calor arriba y abajo durante unos 30 minutos. Veremos que el costillar se va dorando y el jugo se va reduciendo.
6- Abrimos el horno y añadimos las ciruelas, la salvia y echamos un chorrito de miel por encima del costillar. Lo seguimos horneando durante unos 15 o 20 minutos vigilando que la miel no se queme y ya lo podemos servir bien caliente.
SUGERENCIAS:
- Podemos sustituir la salvia por romero, tomillo o laurel.
- Podemos poner "salsifins" en vez de nabos, o también patatas.
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