Una combinación cojonuda.
Ingredientes para 4 personas:
- 4 calabacines de tamaño medio.
- 100 grs. aceite de oliva virgen.
- 1 o 2 dientes de ajo.
- 250 grs. de bacalao desalado, sin piel ni espinas.
- Sal y pimienta.
- Unas hojas de sálvia.
- Leche (opcional, es por si queda demasiado espesa).
- Queso rallado.
ELABORACIÓN:
Cortamos los calabacines por la mitad de arriba a abajo y les hacemos pequeños unos cortes en la parte interior que ayudarán a cocerlos. Echamos un chorrito de aceite de oliva en una sartén y cocemos las mitades de calabacín durante unos 5/7 minutos por cada lado.
Una vez cocidos los ponemos en una bandeja de horno con la parte de la piel hacia abajo y pasamos a preparar la brandada. Ponemos un cazo en el fuego con los 100 gramos de aceite de oliva virgen y los ajos a fuego suave durante unos 5 minutos, vigilando que los ajos no se quemen, deberían quedar confitados. A continuación echamos el bacalao bien escurrido y lo cocemos durante 1 minuto más. Una vez cocido lo pasamos por la batidora eléctrica y si vemos que queda demasiado espeso podemos añadir un chorrito de leche. Finalmente ponemos la brandada encima del calabacín y echamos pimienta, la salvia y el queso rallado. Lo gratinamos al horno unos 5 minutos hasta que el queso se vea dorado y ya se puede servir calentito.
SUGERENCIAS:
Si no disponeis de los ingredientes o el tiempo necesario para la brandada podeis encontrar varias ya hechas en el mercado.
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