Una tapa de rollitos de calabacín con un relleno espectacular

Con el calor que corre este verano, hacer unas tapas frías es una buena solución para hacer una cena al aire libre. El salmón ahumado es una buena forma de comer pescado sin tener que encender los fogones, además, el queso le aporta cremosidad y un extra de frescura. Estos rollitos de calabacín se comen en dos bocados y siempre te quedan ganas de devorar uno más.

Ingredientes para unos 12 rollitos:

  • 2 calabacines medianos.
  • 300 gramos de queso fresco (Philadelphia).
  • 100 gramos de salmón ahumado.
  • 1 cucharada de eneldo.
  • Sal y pimienta.
  • Aceite.
  • Semillas de sésamo negro (para decorar).

ELABORACIÓN:

1- Lavamos los calabacines y los cortamos en láminas en sentido vertical de un grosor de 2-3 mm. Nosotros lo hemos hecho con una mandolina, pero también se puede hacer con un pelapatatas o también un buen cuchillo.

2- Ponemos los trozos de calabacín en una plancha con un poco de aceite y salpimentados y los cocinamos a fuego medio un par de minutos por cada lado. Una vez cocidos los reservamos y los dejamos enfriar.

3- Cortamos el salmón en trocitos pequeños y los ponemos en un bol, añadimos el queso fresco y el eneldo y finalmente lo mezclamos.

4- Extendemos los cortes de calabacín, esparcimos la mezcla de queso y salmón por encima, lo enrollamos y finalmente lo pinchamos con un palillo, así nos aseguramos de que no se desmonten.

5- Lo dejamos un rato en la nevera y una vez los vamos a comer echamos un chorrito de aceite por encima de los rollitos de calabacín y también esparcimos unas semillas de sésamo.

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