GALLETAS DE QUESO Y TOMATE

Una galleta salada, crujiente y llena de sabor.

Esta receta de galletas de queso, además de fácil, ofrece la posibilidad de hacer diferentes combinaciones de sabores. Podemos añadir aceitunas negras, pipas de girasol, frutos secos o también otros tipos de queso, como por ejemplo un Parmesano o un Pecorino. También podemos cambiar el romero por tomillo, orégano o incluso salvia.

Estas galletas de queso se pueden comer calientes o frías, pero en cualquier caso, si nos sobran se pueden guardar en un recipiente hermético durante unos días. Si os gustan estas galletas saladas recomendamos también nuestras recetas de galletas de queso o también las galletas de sobrasada.

Ingredientes:

• 200 gramos de harina.
• 1 huevo.
• 120 gramos de mantequilla.
• 200 gramos de queso tipo Emmental.
• 3 trozos de tomate seco en conserva de aceite.
• Sal/pimienta.
• Romero fresco.

ELABORACIÓN:

1- Ponemos la harina y el huevo en un bol. Añadimos la mantequilla cortada en dados, el queso rallado y los tomates cortados en trocitos pequeños. También ponemos las hojas de romero picadas y lo salpimentamos con precaución, ya que el queso y el tomate ya aportan sal.

2- Lo removemos con una cuchara y cuando empiece a quedar una masa compacta lo seguimos trabajando con las manos.

3- Dividimos la masa por la mitad y formamos un cilindro con cada una de las partes. Envolvemos los dos cilindros con film transparente y los dejamos reposar en el frigorífico un mínimo de 1 hora.

3- Una vez tenemos los cilindros de galletas de queso bien fríos, los retiramos del frigorífico y los desenvolvemos . Cortamos los cilindros en rodajas de un centímetro de grosor, si vemos que el cuchillo se pega y no corta bien lo podemos mojar con agua caliente.

4- Ponemos papel cuisson en la bandeja de horno y repartimos las galletas por toda la superficie.

5- Horneamos las galletas de queso a 180-200 grados con calor inferior y ventilador durante unos 12-15 minutos o hasta que queden bien doradas.

6- Las retiramos del horno, las dejamos enfriar un poco y ya nos las podemos comer.

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